Celso Castro* es nuestro Wes Anderson. El dandy texano adaptaría entre orgasmos entre culebras y extraños. Contiene en estado puro varias de sus obsesiones: el amor adolescente, los jóvenes monstruos salingerianos –desmesuradamente intelectuales-, las drogas a destiempo, los traumas familiares, […]
Lo primero que el lector puede hacer con un escritor es ignorar su sexo. De este modo, al prescindir de motivaciones de atracción, indiferencia o repulsa, no querrá conocerlo, y no podrá establecer relaciones de contigüidad entre la fisonomía de […]